Adolfo Paz Ardines fue Alcalde de Linares en los fragores de la Revolución Mexicana.
Él fue Alcalde de Linares en los años de 1914-15. Pariente cercano de don Antonio de la Paz (quizá su hijo) no tuvo temor de enfrentar en 1846 al Ejército Norteamericano que invadía a México y exhortó a los linrenses a tomar las armas: «Conciudadanos ha sonado ya la alarma para los mexicanos, está dada por el Supremo Gobierno».
«Dos son las órdenes que en veinticuatro horas ha recibido esta Jefatura, para poner en marcha sobre su recibo a todas las fuerzas locales de esta ciudad…
Amables linarenses, lejos de vosotros la afrenta y el oprobio EL DEBER Y EL HONOR nos prescriben volar a la DEFENSA DE LA CAPITAL: MONTERREY, partamos pues, a impartirles nuestros débiles cuanto inútiles esfuerzos. seguros de que la providencia divina velará por el desenlace de la presente lucha, CORRESPONDA A LA JUSTICIA DE NUESTRA CAUSA».
Imagine usted, el movimiento armado de los linarenses… se encargaron de avituallar al improvisado contingente, Jesús María Benítez y Pinillos, lo auxiliaban Miguel Gómez, José Ma. Jaramillo, Ignacio Villegas, Julián Morales, Tomás Décima, Antonio Treviño, Cosme Pérez, Isidro Saldaña, Evaristo Barrón, Néstor Rivera y Rafael Mancha.
Comandados por don Antonio Paz, salieron rumbo a Monterrey más de 400 linarenses a enfrentar al invasor Ejército Norteamericano. Por las lluvias, la impericia o lo que usted quiera, ellos fueron comunicados que el 21-23 de septiembre de 1846, las Fuerzas Mexicanas habían sido vencidas por el Ejército Norteamericano.
De ahí que regresaron los linarenses, sin duelo y sin gloria.
Era la Guerra México-Norteamerica de 1846, y eso valdría para que en el año de 1847, Linares fuera Capital de Nuevo León.
Dejamos ahí la narración de quien en 1914-1915, tiempos de la Revolución Mexicana, fue el Alcalde de Linares, don Adolfo Paz Ardines, descendiente de don Antonio de la Paz, personaje en la historia de Linares.
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