Código Magenta revela investigación de un contrato por 15 mil mdp con una empresa que forma parte del grupo fundado por el coahuilense Antonio Juan Marcos Issa
Una empresa con origen en Coahuila fue pieza clave en lo que podría ser uno de los mayores fraudes del actual sexenio. Así lo reveló una investigación de Código Magenta, que documenta cómo BME SUBTEC, filial del Grupo Industrial Durandco —empresa que agrupa a la vieja Blue Marine, con raíces en la familia del político coahuilense Antonio Juan Marcos Issa—, fue beneficiada con un contrato directo por 15 mil millones de pesos para rentar un buque a Petróleos Mexicanos (Pemex).
El caso involucra a funcionarios cercanos al círculo presidencial, entre ellos Javier Núñez López, amigo de Andrés Manuel “Andy” López Beltrán, hijo del presidente Andrés Manuel López Obrador. Núñez, quien alguna vez fue chofer de Andy, llegó a convertirse en subdirector de Abastecimientos de Pemex y representante legal de Pemex Exploración y Producción. Desde esa posición, firmó el contrato con BME SUBTEC el 24 de enero de 2023, sin licitación pública, por un plazo de 10 años y pagos que equivalen a más de seis millones de pesos diarios por 20 días de servicio al mes.
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De acuerdo con la investigación de Código Magenta, el contrato —cuya copia forma parte del expediente en poder del medio— asciende a 8 mil 761 millones de pesos, más 341 millones de dólares adicionales, y tiene vigencia hasta enero de 2033. Es decir, fue firmado durante el gobierno de López Obrador, pero se extenderá más allá del próximo sexenio.
DE ‘VILLANA’ A ‘PROVEEDORA FAVORITA’
El caso resulta especialmente controvertido porque Blue Marine, la empresa detrás de BME SUBTEC, fue durante años señalada por prácticas de corrupción y favoritismo en contratos con Pemex durante los gobiernos del PRI y el PAN. De hecho, el propio López Obrador la había criticado públicamente, calificándola como parte de la “Mafia del Poder” por los sobreprecios en la renta de embarcaciones.
Sin embargo, bajo la Administración actual, la empresa resurgió con nuevo nombre y nueva estructura corporativa. BME SUBTEC fue creada el 28 de junio de 2019, apenas seis meses después de iniciada la llamada Cuarta Transformación. Detrás del cambio de imagen, explica Código Magenta, se escondía la misma red de socios encabezada por los hermanos Juan y Alfredo Reynoso Durand, quienes controlan Blue Marine desde hace dos décadas.
La pieza que, según el reportaje, permitió que Blue Marine recuperara su posición privilegiada fue la relación familiar entre Daniel Asaf Manjarrez, jefe de la Ayudantía del presidente López Obrador y amigo cercano de Andy, y Emiliano Pescador Asaf, director general de Blue Marine. Son primos.
Esa cercanía habría sido la llave para que la empresa coahuilense obtuviera uno de los contratos más cuantiosos otorgados en el sexenio.
UN CONTRATO QUE DESAFÍA LOS DISCURSOS ANTICORRUPCIÓN
La investigación de Código Magenta subraya que el contrato otorgado a BME SUBTEC supera en monto a la llamada Estafa Maestra y es equiparable al desfalco por 15 mil millones de pesos de Segalmex, considerado el mayor escándalo de corrupción del actual gobierno.
El buque rentado, según fuentes consultadas por el medio, no cuenta con las características técnicas que justificarían el elevado costo del servicio. Además, advierten que su vida útil difícilmente se extenderá hasta 2033, año en que vence el contrato.
El contraste es inevitable: la misma administración que prometió “no mentir, no robar y no traicionar al pueblo” habría otorgado, en la oscuridad de un contrato sin licitación, una fortuna pública a una empresa antes repudiada por el propio presidente.
HERENCIA COAHUILENSE EN EL CENTRO DEL ESCÁNDALO
Blue Marine, y ahora BME SUBTEC, tienen raíces que se remontan a Antonio Juan Marcos Issa, empresario y político originario de Coahuila, quien durante su paso como asesor de la dirección de Pemex en los años 2000 fue acusado de aprovechar sus vínculos políticos para obtener contratos multimillonarios.
Más de dos décadas después, esta red empresarial vuelve al centro de un escándalo de corrupción. Con el respaldo de relaciones familiares y políticas al más alto nivel, la empresa que alguna vez fue símbolo de la vieja élite petrolera reaparece, ahora bajo el amparo del poder que prometió erradicar esos mismos privilegios.
La investigación de Código Magenta concluye que este contrato de 15 mil millones de pesos representa no solo un golpe a la transparencia de Pemex, sino una traición al discurso moral de la Cuarta Transformación. Lo que alguna vez fue “la Mafia del Poder” se transformó, una vez más, en la “Mafia del Presupuesto”.