Para efectos tácticos recomiendo los Cuartos de Guerra Virtuales, donde se informe a tiempo real sobre las alertas que registren los indicadores políticos que constituyen la correlación de fuerzas.
Los Cuartos de Guerra o Cuartos de Situación, son reuniones donde coinciden los políticos con sus estrategas o analistas políticos.
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Eran el centro de mando durante la segunda guerra mundial comandada por Winston Churchill en Londres. Una pieza central del Cuarto de Guerra era la Sala de Mapas. Era crucial conocer a tiempo real la condición de lugares y rutas. Los mapas eran fundamentales para el cuarto de guerra, como ahora, en la confrontación política lo son los Monitoreos y las Cartas de Navegación Política.
En el ámbito político se han popularizado los Cuartos de Guerra en las campañas electorales y también para orientar gestiones de gobierno; por lo común se reúnen una vez por semana.
Es claro que entre mejor y más oportuna información se tenga sobre la condición de la correlación de fuerzas y sobre la evolución de los indicadores políticos, mejores decisiones se pueden tomar en táctica y estrategia, en el propósito de ser lo más competitivos que se pueda.
Es claro también que los Cuartos de Guerra que para el propósito anterior usan encuestas tradicionales, se quedan con una idea relativamente buena en cuanto a la Condición que se tiene, pero con una idea pobre sobre la Evolución de los indicadores políticos.
A la luz de lo expuesto en las lecciones anteriores, resulta más conveniente orientar la toma de decisiones con base en mis Monitoreos y Cartas de Navegación Política.
Para efectos tácticos una reunión semanal es insuficiente, por ello recomiendo los Cuartos de Guerra Virtuales, donde se informe a tiempo real sobre las alertas que registren los indicadores políticos que constituyen la correlación de fuerzas.
Eventualmente se hará necesario un rol más influyente, en los cuartos de Guerra o de Situación, del Cartógrafo Político.
COMENTARIO A LA LECCIÓN#36, DEL DR. ALFREDO CUÉLLAR, CREADOR DE LA MICROPOLÍTICA
Fresno, California, 12 de octubre de 2025
Coincido plenamente con la idea central de la Lección #43: todo Cuarto de Guerra requiere un “Cartógrafo Político” o como le llamen en otra parte, porque como es con las nuevas disciplinas, no se les llama de la misma manera. El CARTÓGRAFO, no solo interpretará los datos, sino les dará sentido estratégico en movimiento. En el lenguaje de la Micropolítica, ese cartógrafo no es un técnico de los números, sino un lector de correlaciones invisibles; alguien que sabe que los mapas no solo representan el terreno, sino también las fuerzas, resistencias y pasiones humanas que lo atraviesan y que siempre están en cambio y ebullición.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Churchill entendió que los mapas eran narrativas de poder: mostraban avances, retrocesos y zonas de incertidumbre. Hoy, en la política contemporánea, las Cartas de Navegación Política cumplen la misma función simbólica y táctica que Churchill y Eisenhower le dieron en la 2a Gran Guerra. Permiten ver no solo dónde estamos, sino hacia dónde se mueve la energía colectiva. En ese sentido, el Cartógrafo Político se parece mucho al micropolítico: ambos observan lo que no se ve, detectan variaciones sutiles y comprenden que la correlación de fuerzas no es un dato estático, sino un organismo vivo.
Señalas con acierto Salvador, que las encuestas tradicionales captan la condición pero no la evolución de los indicadores. Ese es precisamente el punto donde la Micropolítica aporta su lente: la evolución no se mide en números, sino en tensiones, silencios, gestos, fracturas internas y desplazamientos simbólicos. Son como misterios descubiertos.
La política real ocurre entre los datos, en los pliegues del poder y en las decisiones que se toman fuera del foco público.
Por eso, los Cuartos de Guerra Virtuales o de Situaciones que propones me parecen una innovación necesaria: la inmediatez informativa no debe sustituir la profundidad interpretativa. En un contexto de sobreinformación, el rol del Cartógrafo Político es distinguir entre la señal y el ruido, entre el dato que orienta y el dato que distrae.
En suma, los Cuartos de Guerra —ya sean electorales, institucionales o corporativos— no pueden limitarse a recopilar métricas. Necesitan un eje hermenéutico, una brújula ética y una mirada micropolítica. Solo así el mapa dejará de ser una representación del pasado y se convertirá en una estrategia del futuro.
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SALVADOR BORREGO
SALVADOR BORREGO es Doctor en Estadística, director de SABA CONSULTORES, S.A. de CV, desde 1987, autor del libro Los Monitoreos y Cartas de Navegación Politica de SABA (el nuevo paradigma para medir la Opinión Pública).
Este texto es responsabilidad única, total y exclusiva de su autor, y es ajeno a la visión, convicción y opinión de PorsiAcasoMx