El robo en el Hotel Nuevo León

En esta ocasión te platico sobre un robo que sucedió en nuestra hermosa ciudad de Saltillo. A mediados del siglo pasado, en la céntrica calle de Allende, estaba ubicado un hotel que tenía por nombre Nuevo León, cuyo administrador era el Sr. Alejo M. Saucedo, quien además de ser el responsable de la recepción, lo era también del dinero que los clientes pagaban por su hospedaje.

El día domingo 22 de julio de 1956, lo que parecía un día normal, una jornada laboral rutinaria, con la entrada de clientes —la mayoría de ellos agentes viajeros— y la salida de otros huéspedes que habían estado en Saltillo, el Sr. Alejo se percató de un faltante en la caja por 100 pesos, cantidad de dinero que era el total de las entradas de ese día en el negocio.

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Por cierto, un monto nada pequeño para aquel año, pues esos 100 pesos equivaldrían al día de hoy, considerando una inflación de 157 mil por ciento, a 157 mil 422 pesos con 50 centavos. Déjeme decirle estimada y estimado Saltillense que la inflación es el aumento generalizado de los precios, y también déjeme comentarle que de profesión soy economista, pero esa es otra clase, ¡que digo clase¡, es otra historia, así que volvamos al robo de los 100 pesos en el hotel Nuevo León.

Ubiquémonos en la época en la cual no había cámaras de vigilancia, mucho menos cámaras fotográficas o de video como las conocemos hoy en día, así que el Sr. Alejo, al darse cuenta del faltante, no dudo en acudir a la comisión de seguridad. De inmediato la autoridad, al enterarse de viva voz del administrador sobre el hurto, envió a dos agentes investigadores al hotel, quienes, al realizar preguntas, obtuvieron pesquisas para así de manera rápida y expedita hicieron la investigación dando como resultado que el responsable del robo era un huésped quien tenía por nombre Rosendo Gaona Ortiz, quien al ser interrogado —y tal vez de una manera amable— por los elementos policiacos, confesó aún más rápido su delito.

Rosendo el ladrón de los 100 pesos aseguró que aprovechando un descuido del responsable de la caja se acercó a ella para retirar a escondidas, por supuesto, el efectivo que había para después irse a su habitación, lugar en el cual permaneció hasta que los agentes del orden tocaron a su puerta.

El dinero fue devuelto en su totalidad, sí lo 100 pesos, que hoy serían más de 157 mil pesos. Seguramente el Sr. Alejo pudo respirar tranquilo cuando recuperó el efectivo. Por su parte el huésped ladrón fue remitido antes el juez.

Durante un buen tiempo he estado investigando dos cuestiones alrededor de esta Cápsula Sarapera, la primera es sobre la historia del Hotel Nuevo León, del cual ya les platicaré; y la segunda es sobre si los 100 pesos estaban en la caja registradora, o bien en la caja fuerte del hotel, dato que por el momento no he encontrado.

Esta es la historia de un robo que sucedió aquí en nuestra hermosa ciudad de Saltillo en el cual gracias a la rápida intervención de la autoridad el administrador de un hotel que tenía por nombre Nuevo León, pudo recuperar 100 pesos de 1956 que hoy serían alrededor de 157 mil pesos.