El poder invisible de las mujeres que sostienen

E1 17 de octubre recordamos un aniversario más del voto de las mujeres en México. Setenta y dos años desde que, por fin, se reconoció lo que siempre debió ser evidente: que la voz de una mujer también cuenta. Ese día marcó el inicio de una nueva etapa, pero no el nacimiento de nuestra fuerza.

Porque mucho antes de que pudiéramos votar. ya tomábamos decisiones todos los días.

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Decidíamos cómo sostener una casa, cómo criar, cómo resistir. Las mujeres ya movíamos el mundo desde los márgenes, con ternura y con cansancio, aunque esas decisiones no estuvieran registradas en las urnas.

Hoy, en México, las mujeres representan más del 51% de quienes poseen credencial para votar, y en los últimos procesos electorales. también en Coahuila, votaron más mujeres que hombres. según datos del INE y de los institutos electorales locales.

El poder de las mujeres no nació en las elecciones. Nació en los silencios, en las madrugadas sin sueño, en las manos que no se detienen.

En mi madre, mi hermana, mis tías, primas y en mis amigas, en quienes acompañan, enseñan, curan, consuelan.

En mí, cuando me repito bajito: solo un día más, tú puedes.

Ese poder invisible no busca reflectores, pero hace que todo funcione. Es el poder que sostiene, que repara, que no se rinde. El que cuida sin pedir permiso y ama sin condiciones.

Aunque muchos no lo nombren, es el que mantiene en pie a este país.

Cada 17 de octubre celebro más que un derecho ganado: celebro una herencia viviente. Celebro a las que sostuvieron antes que nosotras, para que hoy podamos elegir, decidir, alzar la voz. y seguir sosteniendo, sin miedo, la vida misma.

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