La tarde del sábado, previo al partido entre Tigres y tolucos, había una encuesta en el programa futbolero local de Televisa y la pregunta era por quién votaban para ser finalista, si felinos o mexiquenses. Hecha la encuesta en tierra regias, obviamente, el resultado decía que el 71 por ciento votó por Tigres y el 29 por ciento por los rojos.
Nunca supe de dónde –aparte del fanatismo ciego por los de de amarillo— sacaron valor o algún argumento sensato para considerarlos favoritos. Tenían cinco o seis partidos sin ganarle a nadie, llegaron a esa instancia gracias al Gato de Emilio que no consideró falta un empujoncito sobre un jugador de Necaxa y ante Toluca en la ida mostraron un impresionante 100 por ciento de efectividad. Tiraron una vez a gol y la metieron. Una vez…
Dos o tres veces más lo intentaron, pero a la portería, dentro de los postes, tiraron una vez.
Pudieron comerse cuatro aparte del gol que les hizo Paulinho, pero el payaso con guantes estuvo acertado en dos o tres lances… y en otras, el poste los salvó.
Allá tenían qué ganar y no se veía como…
Toluca, caminando, sin siquiera emplearse a fondo, a medio gas, le metió tres y a punto estuvo de meter tres más de Paulinho, Marcel y Angulo.
Estos Tigres que han estado sin entrenador las últimas semanas no juegan a nada. Es un caballo sin jinete, un bote sin vela a la deriva…
La afición en algún momento va a tener que reconocer que se equivocaron cuando aplaudieron que el exvolante central que se cree director técnico no tiene ni pura idea de cómo parar a un equipo para que juegue con cierto orden… a algo…
Brunetta no hizo el menor esfuerzo, como buen argentino, tal vez motivado de alguna forma por «alguien» para sacar la patita y aflojar el cuerpo, y Gorri se cansó de correr; todos corrieron, metieron, se dejaron caer, fingieron faltas, gritaron y se enojaron… pero futbol, nada.
¿Para eso quería el equipo el farsante éste?
Fueron perfectamente paseados y humillados no solo por los de rojo, también por el cuerpo arbitral que les cobró el boleto gratis que le robaron al Necaxa y ahora les quitaron un gol legítimo que había marcado Ibáñez. No era fuera de juego, pero ya sabemos que esta Liga es una farsa y la gente no quiere darse cuenta.
¿Tu crees que las fallas infantiles de Sepúlveda, solo, frente al arquero americanista en el juego del jueves o la patada de Rivero para hacerse expulsar, fueron algo fortuito?. No me hagan reír…
No sería la primera vez que los Celestes vendieran la piel a precio caro, de las ocho a las 10, en una esquina, como hacía aquella mujer de las que fuman y mascan chicle que contaba en su canción José María Napoleón…
Eso sí, Rivero, uno de los mejores jugadores de esa escuadra tal vez no quiso ser parte de la farsa que veremos este domingo…
¿Por qué creen que se fueron Anselmi de los celestes y Paiva de los toluqueños?…El otro que también se vendió, pero se hizo el disimulado (y la afición también) hizo como que no pasó nada fue el que se acaba de ir de Rayados…
Aaah, pero investigan y castigan a las chicas de Mazatlán y la chiquillada de Apodaca y el Corre y dos equipitos de cuarta de Michoacán… estos tipos de la Liga MX, de la Primera División, son un verdadero nido de alimañas…


Reynaldo Márquez
Periodista desde hace más de 35 años en el norte de México. Ha colaborado en El Norte, ABC y otros medios. Este texto es responsabilidad única, total y exclusiva de su autor, y es ajeno a la visión, convicción y opinión de PorsiAcasoMx