,

AVANZAN EXPORTACIONES… PERO AUTOMOTRICES SIGUEN ATORADAS

La presidenta Sheinbaum anunció, tras hablar con Donald Trump, que no entrarán en vigor nuevos aranceles de EU a partir de noviembre  

La economía mexicana registra señales alentadoras en el frente exportador, pero la industria automotriz evidencia un freno que impide una recuperación plena.

De acuerdo con los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y el análisis de Monex Grupo Financiero, el valor de las exportaciones manufactureras en septiembre alcanzó 52 mil 370 millones de dólares, lo que representa un crecimiento anual de 15.7 por ciento.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: ALARMA EN EL EMPLEO MANUFACTURERO: SE PIERDEN 250 MIL

Los mayores avances se observaron en maquinaria y equipo especial para industrias diversas (76.2 por ciento), productos de minerometalurgia (+12.1 por ciento), equipos y aparatos eléctricos y electrónicos (9.9 por ciento) y equipo profesional y científico (8.9 por ciento).

Sin embargo, pese a este dinamismo en el sector manufacturero en general, la rama automotriz no logra seguir el mismo ritmo.

Las exportaciones de productos automotrices cayeron 0.2 % en el mismo mes, reflejando un retroceso de 7.2 por ciento en las ventas canalizadas hacia Estados Unidos, mientras que los envíos a otros mercados aumentaron 51.2 puntos porcentuales.

El contraste es claro: mientras la manufactura pierde menos tiempo en colgarse el traje de la diversificación, el motor automotor se atasca ante la dependencia de su principal socio comercial.

Este escenario alienta y preocupa al mismo tiempo. Por un lado, el aumento en el valor de las exportaciones manufacturadas sugiere que México está logrando colocarse mejor en cadenas de valor de productos de mayor complejidad, lo cual es una buena noticia para la economía nacional.

Por otro lado, que la industria automotriz –tradicional piedra angular de la manufactura mexicana– permanezca estancada pone en relieve su vulnerabilidad. La caída hacia Estados Unidos advierte que factores como la demanda en ese mercado, la competencia internacional, y los cambios en las cadenas de suministro están pesando más que los esfuerzos de diversificación.

En ese sentido, la industria automotriz enfrenta dos caras de una moneda. En los mercados distintos al norteamericano el repunte del 51.2 por ciento es una luz verde: significa que las exportadoras mexicanas están encontrando rutas alternativas para sus productos. Pero la contracción hacia Estados Unidos no permite que el balance global del sector mejore, lo cual limita la capacidad de esa industria para contribuir fuertemente al crecimiento económico.

Para México, el mensaje es doble: avanzar en la diversificación de mercados y en el fortalecimiento del valor agregado parece funcionar, pero depender aún de la industria automotriz con un solo destino es riesgoso.

Si bien la manufactura muestra dinamismo, la automotriz, con su elevada integración con Estados Unidos y su exposición a cambios globales, se encuentra en terreno frágil. El reto para las autoridades y los empresarios será entonces cómo seguir impulsando el crecimiento exportador, al mismo tiempo que se fortalece la competitividad de un sector que no puede quedarse rezagado.

Estas cifras se dieron el mismo día en que la presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el presidente Donald Trump decidió postergar los nuevos aranceles anunciados para este 1 de noviembre, en particular a los vehículos pesados, segmento del sector automotriz que se ha destacado por ser el más impactado en esta guerra comercial.

A la par, la balanza comercial mostró un déficit de 2 mil 400 mdd, al reportar importaciones por 58 mil 887 millones de dólares, contra exportaciones por un valor de 56 mil 488 millones de dólares.

MÁS NOTICIAS E HISTORIAS EN EL BATISCAFO

Comentarios