Hace años captó mi atención a “la princesa del pop” por los múltiples comerciales que salían en el canal 5 entre las caricaturas que veía en aquella época, seguramente Ranma ½ y Dragon Ball Z. Lejos estaba pensar que a través de esa adolescente que dominaba las cámaras y el escenario había una serie de escándalos y eventos que le daría de ganar millones a la prensa rosa.
Es en el 2023 cuando la cantante Britney Spears a los 41 año publica su libro de memorias, un éxito de ventas antes de llegar a las librerías, apenas dos años después de haberse librado de la tutela de su padre. Se habla de que la editorial Simon & Schuster le habría pagado más de 15 millones de dólares a la cantante de «Work Bitch» por sus revelaciones.
Es de esos libros que muchas veces pasamos de largo pensando en lo superficial o quizá mal escrito que se encuentra, tal vez nos detenemos a pensar cuánto dinero no le dieron a la mano fantasma que realmente escribió el libro. La verdad es que hubo un lapsus y años después de su lanzamiento me atreví a leerlo. Lo quiero manejar como un saliendo de lo habitual.
La publicación no sólo aborda los temas relacionados a la fama que alcanzó el ícono del pop, sino también relativos a su vida privada como la maternidad, sus relaciones personales, problemas psicológicos y por supuesto, la etapa de tutela de la cantante a partir de 2008.
El lanzamiento del libro de memorias de la estrella del pop Britney Spears se convirtió en un parteaguas para la industria editorial en su búsqueda para capitalizar los fandoms de los artistas musicales que crecieron escuchando los millenials y la generación Z. Recordemos años después el lanzamiento del libro de un heredero de la realeza.
Es la primera vez que la cantante habla después del fin de la tutela que le impuso un juez en 2008, cuando atravesaba una profunda depresión, tras separarse de su esposo en la época, Kevin Federline.
“La mujer que soy”, es el intento de Spears por finalmente ganar. Por recuperar su voz y adueñarse del relato que todos, su familia, la prensa, exparejas, amigos o mejor dicho “amigos” (cuando lean el libro entenderán), e incluso varios documentales, vienen contando de ella desde hace muchos años.
Sin duda cuando Spears era muy joven, se convirtió en una figura ineludible de la cultura popular global y pasó luego a ser explotada o maltratada, casi siempre de forma injusta y hasta incomprensible, por aquella misma prensa y público que muy poco antes la habían colocado en la cima del mundo. Lejos se encontraba de una vida dulce igual que el refresco que le dio dinero millones durante años.
Durante 13 años, no pudo ver a sus dos hijos sin autorización. Le confiscaron el permiso de conducir. No podía elegir sus comidas y le prohibieron tomar té o café. Cuando quiso que le retiraran un dispositivo intrauterino (DIU) anticonceptivo, su solicitud fue denegada. Y uno se queja cuando no lo dejan elegir el color de camisa que quieres usar para la boda.
Al terminar el libro, la cantante habla del tiempo y esfuerzo que le costó sentirse lista para contar su historia, y de cómo «desde que soy libre, he tenido que construir toda una identidad distinta». Ese, en el fondo, es el gran tema del libro de Britney Spears, así como de este género memorialístico que viene siendo utilizando por íconos populares: la construcción y exposición de una identidad enfrentada a la imagen, muchas veces distorsionada.
La historia de Spears se narra con la misma calidez accesible que la convirtió en estrella. Y, más allá de los eventos decisivos de los últimos años, cuenta historias interesantes, ya sea describiendo sus antojos durante el embarazo (sexo); o reviviendo el terror que sintió al bailar con una serpiente en los Premios MTV de 2001.
Dejando a un lado a su familia, no hay villanos ni escándalos reales que descubrir. Pero tampoco hay grandes revelaciones sobre la música o la vida íntima de Spears.
Lo que nos queda, y no por primera vez, es una historia que nos advierte sobre la fama y la influencia corruptora del dinero. Y, quizás, un rayo de esperanza para una mujer cuya vida adulta ha sido dictada por otros, menos por ella. Quizá y solo quizá ya lo está logrando.

SERGIO ARÉVALO
SERGIO ARÉVALO es catedrático en comunicación con diplomados en marketing digital y creación literaria por la Universidad Iberoamericana, Director de Radio Universidad UAdeC y autor del libro "Dos cabezas y un corazón". Este texto es responsabilidad única, total y exclusiva de su autor, y es ajeno a la visión, convicción y opinión de PorsiAcasoMx.